domingo, 24 de enero de 2016

Elliott Murphy, literatura y rock & roll


El escritor y músico norteamericano Elliott Murphy está actualmente de gira por España al tiempo que nos presentaba su novela ‘Justicia poética’, editada el pasado año en nuestro país por Tropo Editores. También ha reeditado su primer álbum, ‘Aquashow’, de 1973 que ahora ha producido su hijo, Gaspard Murphy.

Residente en París desde hace 25 años, el músico neoyorquino nacido en el seno de una familia de artistas, comenzó su carrera como cantautor en Europa en 1971, participando en la banda sonora de ‘Roma’, cinta dirigida por Federico Fellini en 1972. Desde entonces, Elliott Murphy ha publicado 35 discos, en los que han colaborado artistas tan relevantes como Mick Taylor o Bruce Springsteen, entre otros. Cuando Springsteen toca en la ciudad del Sena no duda en llamarle para interpretar algunos temas juntos. Como escritor Murphy ha publicado varios libros de relatos: ‘Cold and electric’, ‘The lion sleeps tonight’, ‘Where the women are naked and men are rich’ y ‘Café notes’, así como las novelas ‘Poetic justice’ y ‘Marty May’.

El documental ‘The second act of Elliott Murphy’, dirigido por Jorge Arenillas, acaba de ganar en San Sebastián el premio del público del festival de cine documental Dock of the Bay. Señala entre sus influencias al bluesman Robert Johnson pero también a Bob Dylan y a Lou Reed y al folk revival de los 60. Lo siguiente será “una ópera rock o un disco doble muy acústico con Olivier Durand y mi hijo Gaspard. Tengo unas 24 canciones preparadas”, confiesa el propio Murphy.

Anoche en Madrid tocó por segundo día consecutivo en la sala Galileo Galilei, como siempre acompañado únicamente por su inseparable guitarrista, el francés Olivier Durand. Los dos días llenó el local sin escatimar su repertorio, por otro lado inabarcable pese a las dos horas y media de duración de ambos conciertos. Al final, tras los bises, no pudieron faltar los homenajes a David Bowie, de quien versionó la célebre ‘Heroes’; Lou Reed, a quien recordó tocando ‘Walk on the wild side’, o a Glenn Frey, fallecido el pasado 18 de enero, para lo que interpretó el tema ‘Take it easy’, que fue compuesto por Frey junto con Jackson Browne para los Eagles.


Más información

Página web oficial de Elliott Murphy

Fotografía de Elliott Murphy © Fernando Torres

lunes, 11 de enero de 2016

David Bowie, que estás en los cielos


Se nos ha ido una leyenda. David Bowie fue y será para muchos el artista más original que ha dado la música pop de la segunda mitad del siglo XX y lo que llevamos de éste. Dotado de un genio creativo que fue evolucionando a lo largo de su trayectoria musical, en la que tuvo muy diversas facetas, el pasado viernes aparecía su último legado, ‘Blackstar’. Justamente el día que David Robert Jones cumplía 69 años de edad. Sin duda ha sido premeditado, pues Bowie llevaba dieciocho meses luchando contra un cáncer. Aunque ni él ni nadie podíamos adivinar que fallecería apenas unos días más tarde, el pasado 10 de enero en Nueva York.

A pesar de haber lanzado un disco en 1967, que llevó por título simplemente ‘David Bowie’, y varios sencillos, Bowie no comenzó a ser considerado hasta julio de 1969, cuando su exitosa canción ‘Space Oddity’ llegaba al Top 5 de la lista británica de singles. Después de tres años que supusieron una etapa de experimentación, David Bowie resurgió en 1972, en pleno apogeo del glam rock, con su andrógino y estrambótico álter ego Ziggy Stardust, gracias a la célebre ‘Starman’, perteneciente al álbum ‘The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders from Mars’. La corta vida de Ziggy demostró que se trataba únicamente de una de las etapas de una carrera artística en la que Bowie se fue reinventando continuamente, a base de innovaciones musicales y múltiples presentaciones visuales.

Su biógrafo, David Buckley, declaró: “La esencia de la contribución de Bowie a la música popular se encuentra en su sobresaliente habilidad para analizar y seleccionar ideas fuera de la música –del arte, la literatura, el teatro y el cine– e incorporarlas a ésta; de este modo, el pop se actualiza constantemente.”

‘Blackstar’, o estrella negra, simboliza así y ahora el final de una trayectoria artística irrepetible. Pues como una estrella negra es resultante del consumo completo de la energía térmica de una blanca, un cuerpo estelar frío e invisible en el espacio, su vigésimo quinto disco pone el broche de oro a casi medio siglo de música y talento indiscutible. Descubrir otra estrella como Bowie será francamente difícil, por no decir imposible. Descanse en paz para siempre en un Universo desde el que ya no emitirá su luz y su energía será indetectable. Si bien una forma de hallar su estrella es detectando su colosal campo gravitatorio. Esto Bowie debía saberlo bien.

Vídeo ‘Blackstar’ de David Bowie.