Ha llegado el verano y
con él los cielos despejados de nubes y tachonados de estrellas. Es la época
ideal para asomarse al firmamento hasta casi el amanecer, y practicar a
temperaturas más soportables el siempre sorprendente y gratificante arte de la
fotografía nocturna.
Esta variante de la fotografía es
una práctica que cada día tiene más adeptos gracias a las cada vez más
sofisticadas cámaras digitales. Si bien hay que tener en cuenta unos requisitos
mínimos para obtener unos resultados óptimos, y plasmar así en nuestros sensores
imágenes de buena calidad y correcta composición o belleza. Sin duda, el cosmos
nos puede deparar impresionantes visiones, incluso podremos captar con la
cámara muchas más estrellas o cuerpos celestes que de otra forma no serían
visibles para el ojo humano sin la ayuda de los conocidos prismáticos o
telescopios. Para ello, lo más recomendable es fotografiar siempre en formato
RAW, pues en cada toma obtendremos mucha más información del encuadre celeste
que hayamos elegido, en el que por supuesto podremos incluir o no otros objetos
terrestres: árboles, montañas, lagos, construcciones, etc., y posteriormente
procesar nuestros archivos en el ordenador mediante el correspondiente software,
con el que los “revelaremos” utilizando diversos parámetros en lo que se denomina
proceso de postproducción. En dicho proceso emplearemos varios programas
informáticos que nos serán indispensables para tratar las imágenes capturadas
con nuestra cámara, tales como Lightroom, Camera Raw, Photoshop, Star trails,
entre otros.
Pero antes del procesado
informático de las fotografías deberemos tener muy claras otras cuestiones. En
primer lugar, la cámara ha de ser réflex, a ser posible una DSLR de sensor full
frame que sea capaz de soportar elevados valores de sensibilidad ISO sin que
eso suponga una pérdida de calidad y el consabido “ruido” o granulado. Algo que
los fabricantes están consiguiendo con resultados increíbles, no sólo de cara a
la fotografía nocturna, sino que ya han logrado que sean perfectamente aptas para
realizar astrofotografía. Además, algunas cámaras réflex de gama alta tienen un
modo de Reducción de Ruido de Larga Exposición que permite a la cámara tomar un
fotograma oscuro y mezclar las fotografías para reducir el ruido del sensor.
Tan fundamental como la cámara, o
puede que más, es emplear un objetivo gran angular que permita la entrada de
una gran cantidad de luz, es decir, con un f 2.8 de abertura de diafragma. De
esta forma cuanto más podamos abrirlo más podremos bajar el ISO, reduciendo así
el posible ruido si nuestra cámara es de las que son propensas a ello, ya que
el tiempo de las exposiciones será largo, unos 30 segundos como mínimo para
cada toma. Por tanto, sobra decir que necesitaremos también un buen trípode que
garantice la estabilidad de la cámara en todo momento, incluso si hay algo de
viento. Y para evitar la más mínima trepidación al pulsar el botón del
obturador, también es altamente recomendable el uso de un autodisparador, y si es
con intervalómetro programable aún mejor.
En cuanto al equipo personal, sin
lugar a dudas es necesario el frontal, más todavía en noches sin luna. Otro
accesorio imprescindible en algunos casos es el flash, pues nos servirá para
iluminar elementos terrestres que estén en el encuadre y no demasiado lejanos,
a no ser que lo usemos activándolo de manera remota para iluminar ciertos
objetos que creamos de interés. Debe ser un flash que igualmente podamos
disparar de manera manual llevándolo en la mano. Así podremos iluminar en
aquellos lugares que decidamos fuera de la cámara. Es muy útil que se pueda
regular su potencia y su zoom, así como para dispararlo con geles de diversos
colores. Por las mismas razones serán también de utilidad las linternas led.
Por último, debemos tener siempre
presente la contaminación lumínica que produzcan los núcleos urbanos próximos,
ya que en largas exposiciones es muy posible que repercuta en la fotografía. Esto
por lo general es algo a evitar, a no ser que su efecto nos resulte estéticamente
aceptable.
Más información
Consejos básicos: el triangulo de exposición.
Enlaces de interés
Página web de Lincoln Harrison.
Página web de Mark Gee.
Mario Rubio. Fotógrafo Nocturno.
Cómo encontrar y planificar la Vía Láctea.
Crear Star Trails. Tutorial de Fotografía Nocturna.
Fotografía Star trails ©
Fernando Torres