El filósofo, escritor, periodista y fundador de la corriente de los nuevos filósofos franceses, Bernard-Henri Lévy –también conocido en los medios de comunicación por las siglas BHL– conversó ayer en Segovia –durante una de las jornadas del
Hay Festival que se celebra estos días en esa ciudad castellana– con Juan Luis Cebrián, pensador y fundador del diario El País y miembro de la Real Academia Española.
Francés nacido en 1948 en el seno de una familia judía en Béni-Saf (Argelia), se trasladó a Francia en 1954, para más tarde, en 1968, ser discípulo en la prestigiosa Escuela Normal Superior de París, de Jacques Derrida, Althusser o el mismísimo Sartre.
Hace algunos meses, BHL publicaba en el diario El País un artículo de opinión en el que ofrecía su visión apologética de Israel en el conflicto con la flotilla humanitaria que partió de Turquía con destino a Gaza, y que pretendía romper el bloqueo del que son objeto los palestinos residentes en la franja. Encabezaba el mismo diciendo que “nadie muere de hambre en Gaza, Israel sólo bloquea la entrada de armas”. En esa pretendida maniobra para avivar el odio “cayendo en la trampa de los fanáticos del apocalipsis antijudío”. A lo que inmediatamente replicó la ONU exponiendo que el bloqueo impuesto por Israel sobre la franja de Gaza no concernía únicamente a las armas, como mantenía el filósofo BHL, sino que se aplicaba igualmente a una relación de suministros que incluía el material humanitario, causando con ello perjuicios graves a la población civil de Gaza.
Todos sabemos –y más en política– que las cosas no siempre son como nos parecen. En un mundo malediciente a veces, cuando no hipócrita o injusto, las noticias van y vienen y son emitidas e interpretadas en según qué contexto, geografía, religión o afinidades políticas. Esto, al parecer, lo sabe bien BHL, que en 1971 trabajó como periodista cubriendo la guerra de independencia de Bangladesh, y quien, por otro lado, ha promovido él mismo también en el pasado acciones humanitarias similares, como son un barco para Vietnam; Marcha por la supervivencia de Camboya en 1979; varios boicots antitotalitarios; o más recientemente, la violación intencionada de la frontera de Sudán para romper el bloqueo que estaba favoreciendo las masacres en masa cometidas en Darfur.
Y es que la gravedad real y verdadera de estas “maniobras”, trasuntos políticos, conflictos bélicos o, simple y llanamente, las guerras, es que, indefectiblemente, provocan la pérdida de vidas humanas cuando éstas se llevan a cabo, sea en un lugar u otro del mapa, quedando esas vidas muchas veces inútilmente tendidas en el camino hacia la deseada paz duradera. La paz en Oriente Próximo, en este caso.
Con el propósito de realizar un nuevo –o renovado– intento por alcanzar esa paz perdurable en el Oriente Próximo, se reunieron hace escasos días Obama, Netanyahu y Abbas para lograr llegar al no fácil acuerdo necesario que la garantice.
Enlaces de interés
Artículo de BHL en
EL PAÍS.
Artículo de
Raquel Martí, Directora ejecutiva del Comité Español de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina.
Página web oficial del
Hay Festival Segovia 2010.
Más información
Página web oficial de
BHL.
Bibliografía
Libros de BHL en
Lecturalia.
Nota:
Este mismo año, la editorial Anagrama publicó el ensayo
‘Enemigos públicos’. El libro contiene el intercambio epistolar entre BHL y otro grande de la cultura francesa contemporánea, Michel Houellebecq. Comienza con la carta que envía el casi siempre ácido Houellebecq a Lévy: “Querido Bernard-Henri Lévy: Todo, como se suele decir, nos separa, excepto un punto fundamental: tanto usted como yo somos individuos bastante despreciables...”
Fotografía de Bernard-Henri Lévy AP fuente
Telegraph.co.uk