Bob Dylan expone en Londres sus
crónicas visuales en cuadros que muestran icónicas imágenes del
paisaje estadounidense.
La galería londinense Castle
Fine Art exhibe una serie de pinturas llamada ‘El camino trillado’ (The beaten
path), que según el compositor y premio Nobel de literatura, “representan un
tema diferente del imaginario de la cultura de consumo”.
El músico, compositor, cantante y poeta de Minnesota, considerado como una de las figuras más prolíficas e
influyentes en la música popular del siglo XX y comienzos del siglo XXI, lanzó
por primera vez en 2016 la serie de edición limitada ‘Beaten Path’, que
fue el primer proyecto importante de Dylan en su menos conocida faceta como artista
plástico.
La colección de seis grabados
que se exhibe ahora en Londres es el último capítulo de la crónica visual de un Bob Dylan pintando
esos celebrados paisajes que nos descubren su menos conocido talento pictórico mientras
recorre el corazón del país. Desde las sinuosas autovías de la interestatal de Colorado, los
clásicos moteles de carretera, los emblemáticos paisajes urbanos, los ferrocarriles o el puente de San Francisco, esta colección ofrece una visión personal
del genio de Bob Dylan en algunas de esas bellas panorámicas típicamente americanas.
“Las obras de The Beaten Path
representan un tema diferente del imaginario cotidiano de la cultura de
consumo. No hay nada que sugiera que estas pinturas se basaran en imágenes
mentales que ocurren en los sueños, ni en mundos de fantasía, misticismo
religioso o temas ambiguos. En cada imagen, el espectador no tiene que
preguntarse si se trata de un objeto real o delirante”. Afirma Dylan sobre esta
serie según anuncia la galería.
“Comprender el arte de Dylan
ayuda a apreciar su singular impacto cultural. Su arte: pinturas, dibujos y
esculturas de hierro reflejan su viaje creativo. Dylan, un observador del
mundo, se hace eco de Warhol, Monet y los impresionistas, valorando la
experiencia por encima de los detalles más finos de la imagen terminada”,
asegura el texto curatorial de la galería.
Sin embargo, no es la primera
vez que la obra de Dylan como artista plástico da que hablar. Ya se había ocupado
de las portadas de los discos ‘Music from big pink’ (1968) y ‘Self-Portrait’ (1970).
En 1994 la editorial Random House publicó ‘Drawn Blank’, una serie de dibujos
del cantautor de principios de los noventa donde la expresividad del compositor
fue plasmada en el papel. Una década después, una galería alemana mostraría estas mismas ilustraciones en la exposición llamada ‘The Drawn Blank Series’.
Poco tiempo después, la Galería
Nacional de Dinamarca exhibió cuarenta de sus pinturas acrílicas. Y la Gagosian
Madison Avenue Gallery de Nueva York expuso sus obras entre el 2011 y el 2012,
centrándose en su trabajo artístico contemporáneo, mientras que la galería
inglesa Halcyon exhibiría su trabajo con el hierro en noviembre de 2013.
Ese mismo año inauguraba ‘Mood Swings’,
una presentación de siete puertas de metal creadas por el músico, quien sostuvo
que su afición es algo que siempre lo ha acompañado, pues creció en el Estado
de Minnesota, donde la minería y el hierro son fundamentales. En 2016 esta
misma galería expuso parte de la serie ‘The beaten path’ que actualmente se puede ver en la
galería Castle Fine Art.
Más información
Bob Dylan, ‘The Beaten Path’/ Castle Fine Art.