jueves, 14 de mayo de 2015

Presente y futuro del periodismo cultural VI


La importancia de la cultura en el periodismo en Internet

Ayer,  miércoles 13 de mayo, se dio por concluido el ciclo de debates organizado por la Casa del Lector y Fundación Banco Santander, con la colaboración de la Universidad Complutense de Madrid, que a lo largo de tres meses analizó y debatió sobre el estado del periodismo cultural de la mano de sus principales protagonistas.

Este ciclo ha pretendido no solo responder a ese interrogante sino también crear un espacio para la reflexión y el intercambio de ideas entre algunos responsables de los principales medios de comunicación y los futuros profesionales donde analizar el periodismo cultural, que se ha extendido del papel al ámbito digital, así como las sinergias posibles.

Los invitados que participaron en esta última mesa redonda fueron Ignacio Cardero (El Confidencial), Ignacio Escolar (El Diario), Montse Dominguez (The Huffington Post), Bernardo Marín (responsable de la web de El País) y Carmela Ríos (responsable de nueva narrativa de la web de El Mundo). El coloquio estuvo moderado por Fernando Peinado (profesor miembro de la Junta de Personal Docente e Investigador de la UCM).

Se ha dado la coincidencia de que este ciclo de debates en formato de curso sobre el periodismo cultural ha transcurrido en buena parte en pleno periodo de elecciones al Rectorado de la Universidad Complutense. Fernando Peinado, profesor de las asignaturas de la licenciatura de Periodismo ‘Dirección de medios’, ‘Organización y Gestión de Empresas Informativas’ y ‘Agencias de Información’, tras las correspondientes presentaciones cedió la palabra a Carmela Ríos, que apuntó que en Internet se están produciendo interesantes alianzas, como las que está promoviendo Facebook en la actualidad publicando directamente artículos de The Guardian, The New York Times o la BBC. Afirma que el reto hoy día está en saber elegir la mejor plataforma, el mejor lenguaje para contar las cosas.

Montse Domínguez, que desde 2012 colabora en El Huffington Post (la versión en castellano del periódico “liberal” online y blog de noticias fundado por Arianna Huffington), reflexionó sobre la posibilidad de tratar otros contenidos; cree que no, pero sí que hay que adaptarse a la movilidad de los dispositivos. “Cada vez nos informamos más a través de las Redes sociales”, dijo, e hizo referencia a la aplicación llamada Snapshot, la infografía con que se representa una noticia en un periódico digital para mejorar la información de los contextos que se están tratando. “Ahora somos los responsables de los medios de comunicación los que tenemos que buscar al lector”, añadió. “En El Huffington Post apoyamos proyectos de algunos blogueros que, por ejemplo, promocionan su libro autoeditado; el crowdfunding, la fotografía…”. “Los formatos están en continua transformación y hay que saber en cuáles de ellos están los lectores para publicar ahí”.

A continuación, Bernardo Marín comentó que “hay que hacer ese ejercicio de humildad para encontrar nuevos lectores”. Y explicó que en su caso continúa en el proceso de reciclaje para estar al día de las nuevas tecnologías. No obstante, “las reglas del periodismo no cambian”. “Hay que aprender el oficio de los periodistas tradicionales, si bien el ámbito digital ha sido enriquecedor”. Ignacio Cardero está de acuerdo en que los lectores van un paso por delante. “Desde que se inventó la imprenta hasta la prensa en papel han tenido que pasar 500 años”. “La prensa digital no tiene la calidad ni la profundidad que la prensa tradicional”, afirmó. “La crisis del sector se debe a que no hemos sabido adaptarnos al mundo digital. Si hacemos periodismo cultural tenemos que tener en cuenta dos cosas: en primer lugar, talento; en segundo lugar, adaptarse a los nuevos entornos. El pago por contenidos es una utopía. El Confidencial es un periódico rentable que tiene catorce años de vida. La sección de cultura se creó hace once, y no la creamos hasta que no encontramos a la persona indicada”.

Ignacio Escolar aseguró que hay un 80% de lectores en Internet frente a un 20% en papel. “Nuestro reto fue tener el mejor periódico que pudiéramos pagar; tenemos doce periodistas y hemos conseguido tener doce mil lectores sin ser un periódico generalista”. “Tardamos mucho tiempo en tener una sección cultural porque éramos conscientes de la competencia en ese ámbito. Ahora la nuestra cuenta con contenidos como Jot Down o Carne Cruda”. “En El Diario nos preocupa hacer un periódico evidentemente político, porque la sociedad demanda en la actualidad esos contenidos políticos, pero ¿qué pasaría si los temas dejaran de ser políticos y volvieran sobre el sentido de la vida?...”. La pregunta quedó en el aire.

En estos tiempos de la Era digital el lector tiene mucha oferta informativa, cuando antes lo era de un solo periódico por su ideología política y no leía otra cosa. Ahora el periodismo digital es mucho más plural y, por tanto, ese lector tendrá más elementos de juicio, estará más informado a fin de cuentas. El “problema” actualmente es que es materialmente imposible tener tiempo para leerlo todo.


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Casa del Lector - Fundación Germán Sánchez Ruipérez

domingo, 3 de mayo de 2015

Día Mundial de la Libertad de Prensa


El Día Mundial de la Libertad de Prensa, que se celebra hoy día 3 de mayo, quiere reivindicar el libre ejercicio del periodismo así como impulsar la independencia mediante el libre acceso a la información y el conocimiento, haciendo especial ahínco en la libertad de expresión.

Las acciones motivadas en este sentido tienen como objetivos promover la libertad de expresión y la libertad de prensa, establecer normas reconocidas internacionalmente sobre libertad de expresión e información, fomentar la responsabilidad, la ética y los niveles mínimos de calidad profesional en el ámbito del periodismo, y reafirmar el papel de los medios de comunicación en gobiernos democráticos.

Con estas directrices se pretende consolidar un mayor respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales en los medios de comunicación, así como la ampliación del alcance geográfico de los organismos y administraciones con el fin de luchar de una manera más eficaz contra cualquier tipo de amenaza para la seguridad de los periodistas.

En palabras del escritor y periodista norteamericano Eric Hodgins, “periodismo es llevar información de aquí y de allá, con precisión, perspicacia y rapidez, y en forma tal que se respete la verdad y lo justo de las cosas, y así, aunque no de inmediato, se vuelva más evidente”. Como señala Daniel Sinópoli, autor del libro ‘Ensayos sobre responsabilidad social’, “(…) se define como un espontáneo servicio formativo para el desarrollo del ser humano y el mejoramiento de la convivencia social e institucional (…)”.

Pensar en la libertad de expresión en el contexto periodístico, en nuestros días y en según qué países, es también tener en cuenta las consecuencias de aquello que tergiverse, corrompa o haga dudar del trabajo de los profesionales del periodismo, como son las autoridades gubernativas, los grupos políticos, la delincuencia organizada y todo aquel que tenga en su mano el poder de manipular la información a su conveniencia.

“El periodismo de calidad permite a los ciudadanos adoptar decisiones sobre el desarrollo de sus sociedades con conocimiento de causa, y se esfuerza por sacar a la luz la injusticia, la corrupción y el abuso de poder. Para ello, el periodismo debe tener la posibilidad de prosperar, en un entorno propicio en el que los periodistas puedan trabajar con independencia, sin interferencias indebidas y en condiciones de seguridad”.

Mensaje conjunto del Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, la Directora General de la UNESCO, Irina Bokova y el Alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al-Hussein.

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viernes, 1 de mayo de 2015

Presente y futuro del periodismo cultural V


La crítica cultural

En esta quinta cita del ciclo de debates sobre periodismo cultural organizado por Casa del Lector y Fundación Banco Santander, que cuenta además con la colaboración de la Universidad Complutense de Madrid, intervinieron cuatro responsables de la crítica de otros tantos importantes periódicos, como fueron Ángel Basanta (El Mundo), Juan Ángel Juristo (ABC), Juan Antonio Masoliver (La Vanguardia) y Javier Rodríguez Marcos (El País). La mesa redonda estuvo moderada por el poeta y periodista Carlos Aganzo.

Rodríguez Marcos comenzó el debate explicando la crucial importancia de la crítica en el pasado, poniendo como ejemplo el caso que relata en sus memorias Per Olov Enquist, considerado el mejor escritor sueco contemporáneo y eterno candidato al Premio Nobel. Según cuenta Enquist en ‘Otra vida’, cuando se estrenó en Broadway ‘La noche de las tríbadas’, la pieza sueca más traducida y representada en el mundo durante el pasado siglo, esperaban con gran inquietud a poder leer al día siguiente la crítica en The New York Times. Pero la crítica fue mala y la representación resultó un fracaso. Esa crítica capaz de acabar con una obra ya no se da en la actualidad a tal extremo. Como diría Machado, “ahora es más difícil distinguir las voces de los ecos”. Rodríguez Marcos afirmó que cuantas más voces haya en Internet, más necesaria será la crítica especializada, y recordó al crítico literario y ensayista alemán Walter Benjamin, que dedicó muchas páginas a la publicidad y la crítica. “Lo que yo le pido a un crítico como lector es que sepa más que yo y que lea mejor que yo”, dijo Rodríguez Marcos, y continuó aclarando que “no hay críticas sin criterio. La crítica debe reunir erudición e intuición”.

Juan Antonio Masoliver expresó con cierto pesar que “los críticos cada vez lloramos más por lo que somos”. Asegura que odia la palabra “crítica”. Sostiene que no hay ningún periódico que diga éste es el estado de la literatura. Según Masoliver, “el crítico no debe ser destructivo con el escritor que empieza, debe haber comunicación”. “El crítico también debe ser escritor (como es su caso), incluso divertir”. “El sentido del humor es vital, es un guiño al lector”. “No es verdad que el crítico tenga independencia, un crítico está condicionado. En primer lugar, depende del director del periódico en el que escribe; en segundo lugar, del editor. Y luego están los autores”.

Por su parte, Juan Ángel Juristo dijo que comenzó a trabajar como crítico cuando apareció la novela de Gabriel García Márquez, ‘El otoño del patriarca’. Es decir, hace ahora justamente cuarenta años. Sus críticas se publicaban por entonces en el diario Informaciones y en Diario 16. Juristo declaró que “el crítico debe ser independiente. “Ahora es difícil establecer un canon en la crítica literaria tal y como se entendía antes”. La mayoría de sus reseñas son de autores jóvenes; la capacidad de juzgarlos representa juzgar a los escritores del futuro.

Ángel Basanta, que escribía desde su Lugo natal, el “Finisterre”, comentó que paradójicamente fue tachado de crítico centralista. Y subrayó la diferencia entre la crítica académica y la crítica de urgencia, la crítica de prensa, la cultural. Según Basanta, “el problema más común es la saturación del mercado. Todo va demasiado deprisa, no hay tiempo para leerlo todo”. “Un autor debe en primer lugar conocer la historia de la literatura; en segundo lugar, la teoría de la literatura; en tercer lugar, crítica literaria; y por último literatura comparada”. Basanta explicó que “el único miedo que ha sentido es que pase por sus manos una gran obra y no saber reconocerla”. Y recordó el caso de Gide, cuando éste trabajaba para la editorial Gallimard y rechazó a Proust. “Ese error es inherente al crítico”. Aclaró que “la crítica debe tener la parte informativa, la analítica y la valorativa”. Como decía Musil, el crítico tiene que “acercarse a esa capacidad de acertar”. Basanta explicó que “todos los críticos que han acertado siempre es que no han apostado nunca”. “Incluso Clarín, que fue uno de los mejores escritores de su tiempo junto con Galdós, se equivocó como crítico: no entendió a Valle-Inclán”. Y también afirmó que “Cervantes es más moderno que cualquier escritor actual”.

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Casa del Lector - Fundación Germán Sánchez Ruipérez