viernes, 1 de septiembre de 2023

El arte figurativo de Antonio López

El gran artista manchego se encuentra actualmente inmerso en un nuevo proyecto retratando el paisaje urbano de Madrid.

Antonio López (Tomelloso, 1936) comenzaría a pintar las calles cuando, en la década de los sesenta, decide incorporar nuevos temas a su trabajo. A partir de esa nueva actitud el artista resuelve no añadir nada a la realidad, como ocurre con su primer paisaje que plasma en la obra Madrid (1960). Desde entonces ese enfoque iría ganando terreno en su producción hasta convertirse en el único.

Por esos años es cuando Antonio López asume que su trayectoria, su terreno, es el de pintar la realidad sin elementos añadidos. Desde la mitad de los años sesenta pinta, dibuja y esculpe lo que le interesa sin hacer uso de ningún recurso estilístico, siendo su visión el único filtro y su dominio técnico el medio.

Un talento que fue modelando gracias a la formación temprana que le imparte su tío, el pintor Antonio López Torres, y más tarde, con la que recibe en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, donde, entre 1950 y 1955, cursa sus estudios oficiales de pintura.

Su obra escultórica la desarrollaría en paralelo a la pintura y el dibujo, realizando relieves en distintos materiales, así como sus primeras piezas exentas. Entre 1964 y 1969 imparte la Cátedra de Preparatorio de Colorido en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando. Posteriormente ha dado cursos de forma puntual, dedicándose por completo a la creación artística.

En 1993 Antonio López realiza su primera exposición antológica en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, con gran éxito de público y crítica. En octubre de 2001, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía celebra, con una pequeña muestra y publicación, la adquisición de las esculturas Hombre y Mujer y diecinueve de sus dibujos preparatorios, que se añaden a otras tres importantes obras del pintor pertenecientes a la colección permanente del museo.

En 2006 presenta en la Asamblea de Madrid su pintura urbana de mayor formato realizada hasta el momento, Madrid desde la torre de bomberos de Vallecas, que supera los cuatro metros de ancho y representa casi la totalidad de la superficie de la ciudad vista desde aquel punto. Será en 2008 cuando culmine su primer encargo de escultura monumental pública en solitario, dos grandes cabezas monumentales de bronce de tres metros de altura, La Noche y El Día, que se encuentran junto a la estación de Atocha de Madrid. En octubre de 2010 se inaugura su segunda escultura pública, La mujer de Coslada, en la Avenida de la Constitución de dicho municipio madrileño.

En junio de 2011 se inaugura en el Museo Thyssen-Bornemisza una exposición individual que aúna el carácter retrospectivo con la presentación de su obra más reciente que todavía no había visto la luz. La muestra viaja también ese mismo año al Museo de Bellas Artes de Bilbao.

La obra de Antonio vuelve a encontrarse con el público madrileño en febrero de 2016, con motivo de la inauguración de una exposición en el Museo Thyssen sobre el grupo de Realistas de Madrid, en el que se enmarca al artista junto a los que han sido sus compañeros y amigos desde su etapa de formación: Isabel Quintanilla, Julio y Francisco López, María Moreno, Amalia Avia y Esperanza Parada.

Más información

Web oficial de Antonio López.

Fotografía de Antonio López © Fernando Torres