sábado, 30 de junio de 2018

Un encuentro con Emmanuel Carrère


La Casa de América acogió ayer al escritor, guionista y realizador francés Emmanuel Carrère, último Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances.

El acto tuvo lugar bajo las arañas de cristal de la sala Simón Bolivar, en el suntuoso Palacio de Linares, decorado con tapices, bronces, estucados, suelos de mármol y mosaicos, telas y alfombras, que desde 1992 es la sede de la Casa de América en Madrid. Un centro destinado al intercambio cultural entre España y América.

Con motivo del Premio FIL, galardón anual convocado por la Asociación Civil Premio de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo, que se otorga en México durante la Feria Internacional del Libro de Guadalajara y que en esta ocasión correspondió a Emmanuel Carrère (París, 1957), la crítica literaria Mercedes Monmany conversó con el escritor sobre los aspectos del conjunto de su obra, de la que destaca una narrativa mezcla de ficción y no ficción, normalmente uniendo la propia experiencia del autor con el desarrollo de la historia que cuenta. En palabras de Monmany: “Sus libros, o intensa sucesión de historias encadenadas surgidas de la realidad, manipuladas y mezcladas de forma dinámica, vibrante, por este practicante o activista convencido del periodismo y la literatura a un mismo tiempo, están plagadas turbulentamente de horror y piedad al mismo tiempo, de emoción y conmoción, de autobiografía descarnada e implacable y de apasionantes microbiografías de gente “saturada de vida”, fusionadas a la suya propia.”

Desde que en 1999 publicara ‘El adversario’, la historia real de Jean-Claude Romand, un asesino que mató a toda su familia, inscrita en la tradición de Truman Capote y ‘A sangre fría’, Carrère ha estado escudriñando en la realidad para narrar con su original e intachable estilo historias verdaderas e incómodas, acerca de personajes cuya profundidad le permita crear y desarrollar la brillante literatura a la que ya nos tiene acostumbrados.

El Premio FIL pretende brindar el mayor reconocimiento a los escritores cuya lengua de expresión artística sean las lenguas romances, un jurado de siete destacados intelectuales de las letras, que representan diversas nacionalidades, avala y garantiza la seriedad del premio. El diploma y la suma de 150 mil dólares americanos se otorgan por el conjunto de una obra de creación en cualquier género literario: poesía, novela, dramaturgia, cuento o ensayo.

Los escritores que lo han recibido son: Nicanor Parra (1991), Juan José Arreola (1992), Eliseo Diego (1993), Julio Ramón Ribeyro (1994), Nélida Piñón (1995), Augusto Monterroso (1996), Juan Marsé (1997), Olga Orozco (1998), Sergio Pitol (1999), Juan Gelman (2000), Juan García Ponce (2001), Cintio Vitier (2002), Rubem Fonseca (2003), Juan Goytisolo (2004), Tomás Segovia (2005), Carlos Monsiváis (2006), Fernando del Paso (2007) , António Lobo Antunes (2008), Rafael Cadenas (2009), Margo Glantz (2010), Fernando Vallejo (2011), Alfredo Bryce Echenique (2012), Yves Bonnefoy (2013), Claudio Magris (2014), Enrique Vila-Matas (2015), Norman Manea (2016) y Emmanuel Carrère (2017).

Fotografía de Emmanuel Carrère © Fernando Torres