miércoles, 27 de abril de 2022

Letizia Battaglia, la fotógrafa de la mafia

El pasado 13 de abril falleció a los 87 años en su Palermo natal Letizia Battaglia, la fotógrafa y reportera que más retrató la lucha contra la mafia siciliana.

“Durante años me he dedicado a fotografiar cadáveres. Nos sentimos humillados como pueblo, sometidos y avergonzados por esta tragedia”.

Letizia Battaglia mantuvo siempre una relación de amor-odio con Sicilia; por un lado, estaban sus conmovedoras fotografías de niños y mujeres desamparados, y por otro, el odio no solo por las sangrientas matanzas de las que fue testigo y fotografió, sino también por el consentimiento y el silencio de los años oscuros. Por su trabajo como fotoperiodista obtuvo el Premio W. Eugene Smith de Fotografía Humanista en 1985, el Erich Salomon-Preis en 2007, el más prestigioso que se concede en Alemania, y el Cornell Capa Infinity Award del ICP en 2009.

Nacida en 1935, Letizia Battaglia se casó a los 16 años y fue madre de 3 hijas. En 1969 comienza a trabajar en el periódico de izquierda L‘Ora, siendo la única mujer de la plantilla. Poco después, tras su divorcio se traslada con sus hijas a Milán. Fue amiga de Pier Paolo Pasolini, fotografió a celebridades como Ezra Pound, Dario Fo y Franca Rame. En 1974 regresa a Palermo con su pareja, el fotógrafo Franco Zecchin. Allí ambos fundan la agencia Informazione Fotografica, que visitarían colegas como Josef Koudelka y Ferdinando Scianna, y que sería escuela de formación para un gran número de jóvenes fotógrafos.

Volvió a unirse a L‘Ora hasta que el periódico cierra en 1992. Enfrentada en un entorno de delincuencia, a veces fotografiaba de 4 a 5 asesinatos por día, razón por la cual describió sus imágenes como un “Archivo de sangre”. Como hiciera el reportero gráfico apodado Weegee en el Nueva York de los años treinta y cuarenta, Battaglia también escuchaba los avisos en la frecuencia de la policía para luego dirigirse en su Vespa a la escena del crimen. Y en muchas ocasiones era ella la primera en presentarse en el lugar de los hechos. Así ocurrió también el 6 de enero de 1980 cuando fue ejecutado el Presidente de la Región de Sicilia Piersanti Mattarella, a quien se puede ver en la fotografía que toma Battaglia cuando es sacado del automóvil por su hermano menor Sergio.

Letizia Battaglia no se contentó solo con documentar, sino que participó activamente en diferentes protestas o manifestaciones; por ejemplo, colgó ampliaciones de sus fotografías de masacres en el mercado del pueblo de Corleone. También  fue a las barricadas por la protección del centro histórico de Palermo. En repetidas ocasiones fue amenazada, pero siguió trabajando con la misma determinación que siempre. Únicamente cuando sus amigos, los jueces instructores Falcone y Borsellino, fueron asesinados, detuvo sus actividades contra la Cosa Nostra y se centró más en su faceta política y cultural.

Battaglia estuvo activa en el consejo municipal desde 1985, pero luego siguió mandatos en el parlamento regional y otras instituciones políticas. Durante casi la totalidad de su carrera política, se sentó en el consejo de la ciudad con Leoluca Orlando. También fundaría una editorial y desde el 2000 dirigiría durante tres años la publicación de Mezzocielo, una revista bimensual dirigida a mujeres. En 2017 crea el Centro Internacional dedicado a la Fotografía de Palermo, un espacio destinado también al desarrollo de jóvenes talentos. Así como el depósito de sus archivos con más de 500.000 fotografías.

Letizia Battaglia fue una mujer extraordinaria, un referente internacional en el mundo del arte y un claro ejemplo de cómo la fotografía puede realmente cambiar el mundo.

Más información

La fotógrafa de la mafia (documental).

Fotografía © Letizia Battaglia

domingo, 17 de abril de 2022

Los tesoros de la colección Greenberg

La Fundación Canal muestra en Madrid las fotografías elegidas por la comisaria Anne Morin, que llevan por título ‘Al descubierto. Obras seleccionadas de The Howard Greenberg Gallery’.

Esta exposición la componen 111 imágenes de 66 maestros de la fotografía como Berenice Abbott, Diane Arbus, Vivian Maier, Manuel Álvarez Bravo, Walker Evans, Bruce Davidson, William Eggleston, Robert Frank, Elliott Erwitt, Eugène Atget, Robert Capa, Helmut Newton o Man Ray, que representan un repaso por el último siglo de nuestra historia, con especial atención a los avances que desde EE.UU. se dejaron sentir en todo el mundo. En su mayoría se trata de fotografías inéditas o desconocidas por no haberse mostrado al público antes.

Los fondos proceden del archivo de The Howard Greenberg Gallery de Nueva York, una de las principales referencias mundiales en cuanto a fotografía del siglo XX. Anne Morin, fundadora de diChroma y comisaria de la muestra, tuvo la oportunidad única de bucear en dicho archivo para seleccionar, siempre desde su experta y personal óptica fotográfica, las imágenes más interesantes y los tesoros ocultos de la colección de Greenberg.

Howard Greenberg lleva cerca de 50 años dedicado en cuerpo y alma a completar su colección y a promover grandes talentos fotográficos. En la actualidad, la galería de la que es fundador, cuenta con unas 30.000 imágenes firmadas por los artistas más destacados del último siglo, muchas de las cuales jamás han sido mostradas al gran público ya que su exhibición ha estado restringida al circuito del coleccionismo privado.

Antes de coleccionar fotografías, Howard Greenberg se dedicaba a realizarlas él mismo. Nacido en 1948, comenzó su carrera como fotoperiodista freelance en 1972 en Woodstock, Nueva York. Entre otros medios, publicó sus imágenes en The New York Times, The Washington Post y The Woodstock Times. En 1977, Greenberg fundó el todavía activo Centro de Fotografía en Woodstock, una galería y centro educativo sin ánimo de lucro. Sería en 1981 cuando se introdujo en la comercialización de fotografías al crear en Woodstock la Photofind Gallery.

En 1986 trasladó la galería a Nueva York y, cinco años más tarde, en 1991, la cambió a The Howard Greenberg Gallery, que aún conserva en la actualidad, aunque su ubicación haya variado con el paso de los años hasta su ubicación actual en el edificio Fuller en la calle 57. Howard Greenberg ha comisariado decenas de muestras de fotografía en instituciones tan emblemáticas como el Museum of Modern Art (MoMA) de Nueva York, y su colección de fotografías ha sido objeto de grandes muestras en lugares como la Fundación Henri Cartier-Bresson de París.

Greenberg ha sido miembro de la junta directiva de la Asociación Internacional de Marchantes de Fotografía (AIPAD), organización a la que pertenece desde 1984, y ha sido considerado por la revista American Photo como una de las 25 personas más influyentes del ámbito fotográfico a nivel mundial.

Más información

Fundación Canal.

Enlaces de interés

Visita virtual a la exposición ‘Al descubierto’.

The Howard Greenberg Gallery.

Fotografía Josephine Baker, New York (1950) © Eve Arnold/Magnum Photos

domingo, 3 de abril de 2022

La reapertura del mítico Hotel Chelsea

El legendario Hotel Chelsea, elegido patrimonio cultural de Nueva York en 1966, está a punto de reabrir sus puertas y gestionar las primeras reservas.

A mediados del pasado año, la cadena BD Hotels, que gestiona 24 hoteles en la ciudad de Nueva York y que es propietaria del edificio desde 2016, consiguió superar todos los obstáculos vecinales y administrativos para continuar la reforma necesaria con el compromiso de mantener el viejo espíritu de este famoso inmueble.

El Chelsea de 12 pisos y 250 habitaciones, construido originalmente en 1883 en el número 222 de la calle 23, entre la Octava y la Séptima Avenida, que fue la primera cooperativa de apartamentos de Manhattan y el edificio más alto de Nueva York hasta 1902, se convertiría en hotel y residencia en 1905. Con el tiempo considerado un baluarte impenetrable para escritores, músicos y otros bohemios inquilinos, desde sus inicios ha sido un lugar de gran tradición artística.

En él vivieron, crearon y fueron parte de su formidable historia Mark Twain, Dylan Thomas, Tennessee Williams, Arthur C. Clarke, Stanley Kubrick, Arthur Miller, Bob Dylan, Joni Mitchell, Dee Dee Ramone, Larry Rivers, Milos Forman, Janis Joplin, Donald Sutherland, Patti Smith, Philip Taaffe, Dennis Hopper, Andy Warhol, Edie Sedgwick, Eugene O’Neill, Vladimir Nabokov, Jane Fonda, Leonard Cohen, William S. Burroughs, Allen Ginsberg, Jack Kerouac, Robert Mapplethorpe, Jimi Hendrix, Tom Waits, Courtney Love, Sam Shepard, Charles Bukowski, Julian Schnabel, Jasper Johns y Quentin Crisp, entre otros muchos.

Era importante hacer algo como homenaje a todo ese increíble legado, se dijo el director y guionista de cine estadounidense Abel Ferrara, nacido en 1951 en el Bronx de Nueva York. El resultado sería su documental ‘Chelsea on the Rocks’, en el que retrata a algunos de los mencionados y que se estrenó en 2008 en el Festival de Cannes. Uno más de los muchos homenajes que los artistas han dedicado a este hotel, donde Arthur C. Clarke escribió ‘2001: Odisea en el espacio’; Leonard Cohen se inspiró para componer su melancólica ‘Chelsea Hotel’; Joni Mitchell la canción ‘Chelsea Morning’, o Andy Warhol rodara allí su ‘Chelsea Girl’, el primer éxito de The Factory.

Patti Smith, en su libro de memorias ‘Just Kids’, cuenta como una noche del verano de 1969 vio por allí a Janis Joplin con sus músicos, Jimmy Hendrix con una chica rubia, la cantante de rock psicodélico Grace Slick con su banda Jefferson Airplane y los miembros del grupo Country Joe and the Fish. Todos habían hecho allí su parada obligada antes de partir hacia el Festival de Woodstock.

Bob Dylan se mudó al apartamento 211 con su nueva esposa Sara, produjo su álbum ‘Blonde on Blonde’ y tuvo a su primer hijo, Jesse, mientras residía allí. Otros músicos que se alojaron en el edificio fueron The Band, Iggy Pop, Frank Zappa y los malogrados Sid y Nancy, la pareja punk que protagonizó uno de los trágicos episodios más célebres de la leyenda negra de este hotel. En 1978, Sid Vicious y su novia Nancy Spungen se alojaron en el hotel durante una corta temporada, estancia a la que puso fin su adicción a la heroína. Al poco de establecerse en la habitación 100, Nancy fue encontrada muerta, apuñalada en el estómago. El bajista de Sex Pistols se declaró inocente del crimen, pero poco después la policía encontró sus huellas dactilares en el arma homicida. Sin embargo, Sid se libró de la condena porque también murió tras inyectarse una sobredosis letal.

La fotógrafa Linda Troeller, que vivió en el hotel entre 1994 y 2013, es la autora de la memoria visual ‘Living in the Chelsea Hotel’ (2015). Un libro en el que recoge imágenes de los últimos retazos de la bohemia que frecuentaba este emblemático establecimiento. Entre los retratados está el actor Ethan Hawke, que se instaló en el hotel tras divorciarse de la actriz Uma Thurman y que fue vecino de habitación de Linda Troeller. Ethan Hawke es también uno de los protagonistas del documental de Abel Ferrara.

El Hotel Chelsea se cerró a nuevos huéspedes en 2011 y algunos artistas se vieron obligados a irse debido a sus retrasos en el pago de la renta, mientras que otros optaron por irse voluntariamente. El nuevo propietario no contempló ciertos aspectos de la normativa de construcción, por lo que la asociación de inquilinos denunció algunos de estos problemas.

Ahora, tras la reforma, todo parece indicar que este afamado hotel reanudará en breve su actividad hotelera.

Más información

Site oficial del Hotel Chelsea.

Enlace de interés

Chelsea on the Rocks’, Abel Ferrara.

Fotografía Chelsea Hotel Wikimedia Commons