domingo, 10 de marzo de 2024

Muere el irónico fotógrafo Ramón Masats

El veterano fotógrafo catalán Ramón Masats falleció en Madrid el pasado 4 de marzo a los 92 años.

Su interés por el mundo de la fotografía comenzó cuando realizaba el servicio militar. Aburrido, descubrió la revista Arte Fotográfico. Adquirió una cámara con el dinero que le sisaba a su padre, hizo sus primeras fotos y se inscribió en el círculo fotográfico del Casino del Comercio de Tarrasa.

Inició el camino del reportaje en 1953 con un trabajo sobre Las Ramblas. Al año siguiente ingresó en la Agrupación Fotográfica de Cataluña, compartiendo vivencias con colegas como Ricard Terré y Xavier Miserachs. En 1957 se instaló en Madrid y recorrió España trabajando como reportero para la revista Gaceta Ilustrada. Ese mismo año ingresó en el Grupo AFAL, y junto a sus amigos tertulianos de la Real Sociedad Fotográfica de Madrid, Gabriel Cualladó, Paco Ontañón, Leonardo Cantero, Joaquín Rubio Camín y Paco Gómez, creó el grupo fotográfico La Palangana.

Entre 1958 y 1964 trabajó para diferentes revistas, como la mencionada Gaceta Ilustrada, Mundo Hispánico, Arriba o Ya, y expuso su trabajo tanto en exposiciones individuales como colectivas. En 1960 recibió el Premio Negtor de fotografía. En 1962 publicó el libro Neutral Corner, de la editorial Lumen, con textos de Ignacio Aldecoa. En 1963 editó Los Sanfermines con Espasa Calpe, por el que recibió el Premio Ibarra al libro mejor editado. También expuso con el Grupo El Paso en la sala Biosca de Madrid.

En 1964 publicó ‘Viejas Historias de Castilla la Vieja’ con Miguel Delibes, expuso con Carlos Saura en la galería Juana Mordó y realizó su primer documental, ‘Prado Vivo’, que ganó el premio especial en Taormina.

En 1965 dirigió El que enseña, con el que ganó el Premio Miqueldi de Plata en el Festival Internacional de Cine Documental y Cortometraje de Bilbao. Se alejó de la fotografía durante dieciocho años para dedicarse a la realización de documentales para TVE, donde la temática general solían ser los pueblos de España y sus costumbres, con series como ‘Conozca Ud. España’, ‘La víspera de nuestro tiempo’, ‘Los ríos’, ‘Si las piedras hablaran...’ Esta etapa culminó con un largometraje que llevó como título ‘Topical Spanish’, con guion propio y del humorista Chumy Chúmez, protagonizada por el grupo musical Los Iberos, Guillermina Motta, Victor Petit y José Sazatornil.

En 1981 regresó a la fotografía y desde entonces ha publicado diversos libros, realizado trabajos para empresas e instituciones, incluidos varios documentales para la Exposición Universal de Sevilla de 1992, y diversas conferencias y exposiciones, tanto retrospectivas como de sus trabajos más recientes, en salas como el Círculo de Bellas Artes, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía o la Real Fábrica de Tapices en Madrid, el Palau de La Virreina en Barcelona, el Palacio de la Magdalena en Santander, la Galería Marlborough de Madrid o las sedes del Instituto Cervantes en diversas ciudades del mundo.

Obra en diferentes colecciones: Centro Nacional de Arte Reina Sofía, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, Museo Nacional de Arte de Cataluña, entre otros.

Enlace de interés

El ojo irónico. Ramón Masats.

Fotografía de Ramón Masats (Palencia) © Ángel Herraiz

martes, 27 de febrero de 2024

Jordi Socías. ‘Al final de la escapada’

La Sala Canal de Isabel II presenta la exposición ‘Al final de la escapada’, que recorre la trayectoria vital y profesional del fotógrafo catalán Jordi Socías, desde mediados de los años setenta a la actualidad.

Fotógrafo y editor gráfico, Jordi Socías (Barcelona, 1945) comenzó a interesarse por la fotografía a través del mundo del cine y con 27 años decide formarse de manera autodidacta, a la vez que observa el trabajo de fotógrafos destacados.

Socías se emplea como fotoperiodista colaborando con publicaciones como la revista Destino y La Vanguardia. En 1972 participa en la clandestinidad con la Agencia Popular Informativa (API), pero es en Cambio 16 donde realizaría la mayor parte de su labor, primero en Barcelona y posteriormente en Madrid, convirtiéndose en jefe de fotografía en 1976. Pasaría así a formar parte del llamado nuevo fotoperiodismo español de esa época junto a Paco Elvira, Pilar Aymerich y Manel Armengol, entre otros.

Testigo excepcional del cambio de siglo y editor de importantes publicaciones, por la lente de Jordi Socías han desfilado grandes personalidades de nuestro tiempo. El retrato que le catapultó a la fama fue el realizado a Salvador Dalí en 1979. A partir de entonces, Jordi Socías ha estado los últimos cincuenta años tras la cámara, convirtiéndose en un referente del retrato y fotografiando a grandes nombres de la cultura como Jorge Luis Borges, Paloma Picasso, Francis Ford Coppola o Ai Weiwei.

Estructurada en cuatro plantas y comisariada por Lucía Laín, la muestra reúne una cuidada selección de fotografías, algunas inéditas, y recorre la trayectoria vital y profesional de Socías. Retratos de figuras universales (escritores, artistas, actores, músicos…) y seres anónimos que se intercalan con igual fuerza en escenarios insospechados para el visitante. En paralelo, su visión cosmopolita también se plasma en la exposición en escenas callejeras de grandes ciudades como Tokio, París, Ámsterdam y Nueva York, en las que aparecen personajes que las habitan como en una gran puesta en escena.

La exposición, que se puede ver en la Sala Canal de Isabel II hasta el 21 de abril de 2024, se completa con una amplia selección hemerográfica de portadas e interiores de revistas y libros donde la impronta de Socías está presente como fotógrafo y editor. Sus recuerdos y su enorme universo de objetos y fetiches se amplían en un audiovisual realizado por Emma Tusell en el que la música de Miles Davis marca el ritmo de cada secuencia.

Más información

Sala Canal de Isabel II.   

Fotografía Racalmuto. Sicilia (1979) © Jordi Socías

jueves, 15 de febrero de 2024

Christer Strömholm, el fotógrafo de Pigalle

Considerado el padre de la fotografía contemporánea sueca, Christer Strömholm retrató la bohemia vida nocturna parisina de los años 50 y 60.

La Fundación Mapfre muestra hasta el próximo día 5 de mayo una amplia retrospectiva que cubre todos los aspectos de la extraordinaria producción de Christer Strömholm (1918-2002), indiscutible referente de la fotografía contemporánea por su original trabajo en la tradición documental de índole existencial, desde su participación en el grupo alemán ‘Fotoform’, a principios de los años cincuenta, hasta los ensamblajes de objetos encontrados de su etapa final, pasando por sus múltiples viajes, su fotografía callejera y sus retratos de artistas.

En cierta ocasión, Strömholm afirmó que “No podemos fotografiar la experiencia ajena”. La frase evoca su peculiar concepción de la fotografía, expresada en una obra que refleja tanto su agitada biografía y su frenética actividad viajera como su empatía ante el sufrimiento humano y lo complejo de la existencia en general. Esa perspectiva sensible y moderadamente irónica de la vida dio lugar a una producción fotográfica absolutamente singular y de una estética inconfundible.

En 1937 Christer Strömholm estudió pintura en Dresde con Waldemar Winkler y más tarde en París, ciudad donde comenzó su interés por el existencialismo de Jean Paul Sartre, Albert Camus y Simone de Beauvoir. 

Strömholm realizó diversos viajes con fines fotográficos, entre ellos se encuentra una visita a España entre 1958 y 1960 en la que haría un reportaje sobre la sociedad española durante el franquismo. También viajó a Estados Unidos, Japón, la India, Polonia, la Unión Soviética y Kenia.

Su relevante aportación a la renovación del lenguaje fotográfico fue tardía, pues es en 1968 cuando se presenta en el Moderna Museet de Estocolmo su exposición ‘Nueve segundos de mi vida’. Miembro de ‘Fotoform’ y mucho más tarde director de ‘Fotoskolen’ (Escuela de fotografía) de Estocolmo, en 1997 publica ‘Kloka ord’ (Palabras cuerdas), y recibe el Premio internacional de la Fundación Hasselblad.

Más información

Fundación MAPFRE.

Site oficial de Christer Strömholm.

Enlace de interés

Myglaren’, film protagonizado por Christer Strömholm.

Fotografía Self portrait with model

martes, 30 de enero de 2024

Bob Dylan, ‘The Beaten Path’

Bob Dylan expone en Londres sus crónicas visuales en cuadros que muestran icónicas imágenes del paisaje estadounidense.

La galería londinense Castle Fine Art exhibe una serie de pinturas llamada ‘El camino trillado’ (The beaten path), que según el compositor y premio Nobel de literatura, “representan un tema diferente del imaginario de la cultura de consumo”.

El músico, compositor, cantante y poeta de Minnesota, considerado como una de las figuras más prolíficas e influyentes en la música popular del siglo XX y comienzos del siglo XXI, lanzó por primera vez en 2016 la serie de edición limitada ‘Beaten Path’, que fue el primer proyecto importante de Dylan en su menos conocida faceta como artista plástico.

La colección de seis grabados que se exhibe ahora en Londres es el último capítulo de la crónica visual de un Bob Dylan pintando esos celebrados paisajes que nos descubren su menos conocido talento pictórico mientras recorre el corazón del país. Desde las sinuosas autovías de la interestatal de Colorado, los clásicos moteles de carretera, los emblemáticos paisajes urbanos, los ferrocarriles o el puente de San Francisco, esta colección ofrece una visión personal del genio de Bob Dylan en algunas de esas bellas panorámicas típicamente americanas.

“Las obras de The Beaten Path representan un tema diferente del imaginario cotidiano de la cultura de consumo. No hay nada que sugiera que estas pinturas se basaran en imágenes mentales que ocurren en los sueños, ni en mundos de fantasía, misticismo religioso o temas ambiguos. En cada imagen, el espectador no tiene que preguntarse si se trata de un objeto real o delirante”. Afirma Dylan sobre esta serie según anuncia la galería.

“Comprender el arte de Dylan ayuda a apreciar su singular impacto cultural. Su arte: pinturas, dibujos y esculturas de hierro reflejan su viaje creativo. Dylan, un observador del mundo, se hace eco de Warhol, Monet y los impresionistas, valorando la experiencia por encima de los detalles más finos de la imagen terminada”, asegura el texto curatorial de la galería.

Sin embargo, no es la primera vez que la obra de Dylan como artista plástico da que hablar. Ya se había ocupado de las portadas de los discos ‘Music from big pink’ (1968) y ‘Self-Portrait’ (1970). En 1994 la editorial Random House publicó ‘Drawn Blank’, una serie de dibujos del cantautor de principios de los noventa donde la expresividad del compositor fue plasmada en el papel. Una década después, una galería alemana mostraría estas mismas ilustraciones en la exposición llamada ‘The Drawn Blank Series’.

Poco tiempo después, la Galería Nacional de Dinamarca exhibió cuarenta de sus pinturas acrílicas. Y la Gagosian Madison Avenue Gallery de Nueva York expuso sus obras entre el 2011 y el 2012, centrándose en su trabajo artístico contemporáneo, mientras que la galería inglesa Halcyon exhibiría su trabajo con el hierro en noviembre de 2013.

Ese mismo año inauguraba ‘Mood Swings’, una presentación de siete puertas de metal creadas por el músico, quien sostuvo que su afición es algo que siempre lo ha acompañado, pues creció en el Estado de Minnesota, donde la minería y el hierro son fundamentales. En 2016 esta misma galería expuso parte de la serie ‘The beaten path’ que actualmente se puede ver en la galería Castle Fine Art.

Más información

Bob Dylan, ‘The Beaten Path’/ Castle Fine Art.

miércoles, 17 de enero de 2024

La fotografía moderna en Foto Colectania

Se inaugura hoy en Barcelona la exposición ‘El curso de los acontecimientos. Un atlas de la colección Foto Colectania’. Una historia de la fotografía moderna en España y Portugal.

La Colección Foto Colectania reúne un fondo de más de 3.000 fotografías de autores catalanes, españoles y portugueses. Es, sin duda, la colección privada con una representación más exhaustiva de la historia de la fotografía realizada durante la segunda mitad del siglo XX en la península ibérica. Sus imágenes dan fe de un doble proceso de la llamada modernización, el del propio medio fotográfico y el de las sociedades del sur de Europa.

La fotografía documental de marcado acento humanista define en gran medida esta gran colección. Y lejos de verse simplificadas por el atractivo de la observación directa y empírica, las realidades más genuinas alcanzan una complejidad extraordinaria. Una complejidad que entra en diálogo con las incorporaciones de obras producidas por una generación más joven de fotógrafos y que subraya un repertorio de tensiones latentes en la fotografía moderna.

Pero modernizar a menudo se convirtió en sinónimo de iconizar, reducir y sintetizar la realidad con una imagen emblemática. Esas fueron las fotografías que dieron forma a los acontecimientos, y aunque cada hecho hubiera deparado muchas más versiones de lo ocurrido, solo una adquiría el estatuto de la imagen icónica. Una a la que basta un acuerdo tácito para reconocerla. La exposición propone una lectura a contrapelo de la propia historia de la fotografía que tiende a colapsar y comprimir el desarrollo de los acontecimientos en un número reducido de imágenes.

Imágenes cuya potencia nadie discute, fotografías que preservan innumerables instantes y secuencias. El hombre semidesfigurado de la foto de Xavier Miserachs titulada ‘Calle Pelayo, Barcelona’ (1962) mantiene su iconicidad en función de la multitud a la que pertenece; el retrato del general Franco realizado por Ramón Masats en 1964 se apoya en una imagen de la autoridad ligada al caudillismo, al poder concentrado en la figura individual.

Pero existen otro tipo de acontecimientos, momentos colectivos tales como las manifestaciones, procesiones, ritos y, en general, multitudes que evocan el carácter esencialmente procesual y cuantitativo de la fotografía. Esos instantes requieren más de una imagen. Así que a pesar de las limitaciones naturales que impone el espacio de la exposición, la selección reúne cerca de 160 obras.

El conjunto se distribuye en 24 secuencias agrupadas en 8 bloques distintos. De modo que el despliegue de la selección recrea esa dialéctica entre imagen única y lo que podría calificarse como desarrollo alternativo de los acontecimientos. Es decir, otra película de los hechos que aún puede hacerse más compleja si consideramos que las secuencias alientan una lectura horizontal y los bloques una vertical.

Esta ordenación que remite a un atlas fotográfico –con sus regiones y continentes, algunos más extensos que otros– revela una insólita capacidad de la fotografía en tanto que dispositivo: las imágenes colaboran entre ellas produciendo nuevos significados y, en definitiva, otros acontecimientos que una sola fotografía no podría contener.

Los fotógrafos y las fotógrafas que componen esta exposición son: Laia Abril, Helena Almeida, Manel Armengol, Pilar Aymerich, Clemente Bernad, Josep Maria Casademont, Gérard Castello-Lopes, Colita, Joan Colom, Gabriel Cualladó, Jordi Esteva, Cristina García Rodero, Francisco Gómez, Joaquim Gomis, Fernando Gordillo, Roger Guaus, Cristóbal Hara, Manolo Laguillo, Adriana López Sanfeliu, Ramón Masats, Cristina de Middel, José Miguel de Miguel, Xavier Miserachs, Jorge Molder, Leopoldo Pomés, Jorge Ribalta, Xavier Ribas, Humberto Rivas, Txema Salvans, Rafael Sanz Lobato, Ton Sirera, Ricard Terré y Miguel Trillo.

Más información

Fundación Foto Colectania.

Fotografía (detalle) ‘Calle Pelayo, Barcelona’ (1962) © Xavier Miserachs

viernes, 29 de diciembre de 2023

‘Julia Margaret Cameron: Capturer la Beauté’

“Anhelaba capturar toda la belleza que tenía ante mí y, finalmente, ese anhelo quedó satisfecho”. Julia Margaret Cameron.

Situado a pocos pasos del museo del Louvre, el Jeu de Paume es una de las instituciones culturales más importantes del mundo dedicadas en exclusiva a la fotografía, a la cual abarca desde mediados del siglo XIX hasta la actualidad.

En esta ocasión el Jeu de Paume acoge la primera retrospectiva de esta magnitud dedicada a Julia Margaret Cameron en Francia en 40 años, una gran exposición que muestra un centenar de fotografías, desde sus primeros experimentos hasta composiciones alegóricas, históricas, literarias o figurativas, pasando por una impresionante galería de retratos de sus contemporáneos.

Muy pocos fotógrafos del siglo XIX despertaron tanta curiosidad y criticas entre sus coetáneos como la inglesa Julia Margaret Cameron (1815-1879). Su manera tan personal de emplear la técnica fotográfica en su época, desde el desenfoque hasta los errores diversos, se fue consolidando como la marca de un estilo pionero, que integra de forma innovadora la imperfección y el accidente. Original y atemporal, su obra, realizada en apenas una década, entre 1864 y 1875, representa uno de los más bellos ejemplos de los inicios épicos de la fotografía.

Aunque en sus comienzos fracasó en muchos de sus primeros intentos de tomar fotografías, en poco más de un año fue elegida miembro de la Sociedad Fotográfica de Londres y pronto comenzó a presentar y vender sus imágenes. Amiga o conocida de muchos victorianos prominentes de la época, incluidos Sir Henry Taylor, Sir John Herschel, Thomas Carlyle, Charles Darwin y Alfred, Lord Tennyson, los retratos que les realizó se destacan como algunas de sus mejores obras.

La exposición, producida por el Victoria and Albert Museum, está compuesta principalmente por obras de la artista procedentes de las colecciones del museo británico. Para la etapa parisina de esta exposición, única en Europa, se beneficia de préstamos excepcionales de la Biblioteca Nacional de Francia, el Museo de Orsay y la Casa Victor Hugo.

Julia Margaret Cameron es una parte fundamental de la historia de la fotografía, y el Jeu de Paume de París le rinde un justo homenaje en la retrospectiva ‘Julia Margaret Cameron: Capturer la Beauté’.

Más información

Julia Margaret Cameron: Capturando la belleza’.

Fotografía ‘Yo espero’ (1872) © Colección de la Royal Photographic Society

jueves, 14 de diciembre de 2023

¡Contemplad estos tiempos gloriosos!

El artista estadounidense Trevor Paglen inaugura este jueves 14 de diciembre en Matadero Madrid su exposición ‘Behold these glorious times! (¡Contemplad estos tiempos gloriosos!)’

Trevor Paglen es un artista conceptual cuyo trabajo y obras abarcan la creación de imágenes, la escultura, la ingeniería, la escritura o el periodismo de investigación. 

La muestra, que se enmarca en el LAB#03 de Medialab Matadero, explora cómo los sistemas de inteligencia artificial aprenden a ver y entender el mundo. La obra reúne cientos de miles de imágenes que Paglen muestra en la pantalla con una rapidez vertiginosa e hipnótica a lo largo de doce minutos.

Trevor Paglen, que vive y trabaja entre Nueva York y Berlín, se formó como geógrafo y fotógrafo. Su obra revela las infraestructuras de la guerra, la vigilancia y el control social, habitualmente ocultas al escrutinio público. Ha realizado diversas exposiciones individuales en el Museo Smithsonian de Arte Americano, Washington D.C.; el Museo de Arte Carnegie, Pittsburgh; la Fondazione Prada, Milán; el Centro Barbican, Londres; la Secesión de Viena, y Protocinema Estambul, además de su participación en numerosas exposiciones colectivas.

Esta exposición es la segunda de las cuatro muestras temáticas que integran el ciclo expositivo ‘Imaginarios sintéticos’, comisariado por Julia Kaganskiy, que ocupará la Nave 0 de Matadero Madrid hasta julio de 2024. El ciclo se adentrará en cuestiones como el impacto de los diferentes tipos de inteligencia o la relación entre la computación y la gestión de la crisis climática. La exposición de Paglen toma el relevo de Cosmologías Microbianas, de la finlandesa Jenna Sutela, y precede a dos próximas muestras que completarán el ciclo en 2024.

Trevor Paglen visitará el espacio Matadero Madrid Centro de creación contemporánea el próximo jueves 1 de febrero de 2024 para impartir una conferencia pública sobre la exposición.

‘Behold these glorious times! (¡Contemplad estos tiempos gloriosos!)’ se podrá ver desde el 14 de diciembre de 2023 al 25 de febrero de 2024.

Más información

Matadero Madrid.

Site personal de Trevor Paglen

Fotografías © Trevor Paglen