lunes, 21 de mayo de 2018

Pauline Dreyfus y su ágape entre trincheras


La periodista y escritora francesa Pauline Dreyfus presentó el pasado viernes en Madrid su último libro, titulado en nuestro país ‘El banquete de las barricadas’.

Dreyfus es autora de obras como Le père et l’enfant se portent bien, un conjunto de ocho nouvelles sobre la experiencia de ser padres, o Robert Badinter, l’épreuve de la justice, una biografía del que fuera presidente del Consejo Constitucional y ministro de Justicia francés. Debutó como novelista con Immortel, enfin, que versa sobre el diplomático, escritor, poeta y miembro de la Academia francesa Paul Morand, alzándose en 2013 con el Prix des Deux Magots de manera unánime por primera vez en la historia de este premio literario. Con ‘Son cosas que pasan’, fue finalista de otros importantes premios como el Goncourt, el Giono, el Décembre y el Interallié, recibiendo el Prix Foundation Mémoire Albert Cohen.

Acompañada por el también escritor y periodista catalán Ignacio Vidal-Folch como moderador, Pauline Dreyfus afirma que “la sátira es un buen ángulo para evocar momentos históricos”. La autora describe en su último libro el Mayo del 68 en París a partir de la experiencia que se vivió por entonces en el lujoso hotel Meurice, por el que desfilan personajes reales como el pintor Salvador Dalí, el millonario Jean Paul Getty o un joven Patrick Modiano, que en el ágape organizado para entregar el premio literario Roger-Nimier, resultaría ganador por ‘El lugar de la estrella’, su primera novela de una carrera literaria que culminó obteniendo el Nobel en 2014.

Dreyfus, que en 1968 aún no había nacido, ha manifestado que no siente una especial nostalgia por aquellos tiempos, que “quería mirar con distancia, con un prisma de comedia y sátira”, al contrario que con su novela anterior, “Son cosas que pasan”, que transcurre en los años de la ocupación nazi de Francia. Sostiene que escribir sobre el Mayo francés es hacerlo sobre “el reflejo de una utopía y de un ensueño, y la reflexión de fondo es hasta qué punto se puede cambiar la sociedad y cuál es el límite de lo real”.

Cuando se planteó emprender la escritura de ‘El banquete de las barricadas’ (Anagrama), Dreyfus quería “ir más allá del cliché de Mayo del 68, con los estudiantes, los adoquines, los obreros y las fábricas ocupadas”, de ahí surge la idea de ubicar la acción en el hotel Meurice, situado en la céntrica y refinada rue de Rivoli, donde “nadie espera que llegue la revolución”. En ese hotel, Dreyfus presenta “la misma lucha de clases y las reivindicaciones que había en el resto de Francia”. Allí el personal no se ha sumado a la huelga general que tiene paralizada toda Francia, pero, tras acordarlo, los empleados se deciden por la autogestión, suplantando al director.

Respecto a la opinión de Modiano sobre su novela, Dreyfus ha declarado que mientras escribía el libro se dirigió por carta al Nobel francés en dos ocasiones, e incluso una vez publicado le envió un ejemplar con la dedicatoria “al héroe involuntario de esta novela”, sin embargo él nunca le contestó. “No creo que se trate de algo personal, sino que suele no contestar, por lo que he aplicado el proverbio de que quien calla, otorga”.


Fotografía de P. Dreyfus y Vidal-Folch © Fernando Torres